Queridos hermanos y hermanas:
“¡Dejemos espacio a la luz del Resucitado! Así nos convertiremos en constructores de esperanza para el mundo.”
Con estas palabras del Papa Francisco, que nos anima a ser portadores de luz para quienes atraviesan momentos de oscuridad —ya sea por la soledad, el sufrimiento o el agotamiento— en este Año Jubilar, os dirijo mi saludo en este día en el que celebramos la Pascua de la Gloriosa Resurrección del Señor y, tradicionalmente, miramos atrás para recordar las intensas y emocionantes horas vividas junto al Señor de la Paz y su Bendita Madre del Carmen el pasado Miércoles Santo.
Tras las dificultades que afrontamos en 2024, el Señor nos ha bendecido con la oportunidad de vivir una Estación de Penitencia excepcional. Sin duda, hay motivos para que todos nos sintamos profundamente orgullosos. Vuestra actitud y comportamiento a lo largo de la Estación de Penitencia fueron ejemplares, a pesar del sacrificio que siempre conlleva. Ofrecimos un testimonio firme, sereno y sin incidentes, manifestándolo públicamente por las calles de Sevilla, que, año tras año, nos recibe con un cariño renovado y los brazos abiertos.
Nuestra Hermandad ha vuelto a cumplir fielmente sus compromisos, que este año han sido especialmente exigentes, con las demás Hermandades del Miércoles Santo y el Consejo General de Hermandades y Cofradías, recibiendo por ello merecidas felicitaciones por su ejemplaridad. Todo esto, a pesar de las dificultades que en su organización genera el crecimiento continuo de la Cofradía, que, aunque nos llena de orgullo, nunca debe hacernos olvidar algo prioritario: cuidar al hermano nazareno y aliviar, en la medida de lo posible, las dificultades propias de la Estación de Penitencia.
Gracias a los nazarenos por su esfuerzo, a los monaguillos, al cuerpo de diputados, fiscales y auxiliares coordinados por el Diputado Mayor de Gobierno, acólitos, costaleros, capataces, músicos, personal sanitario y equipo de comunicación por su encomiable labor. Todos contribuís al engrandecimiento de la Hermandad.
Sirvan estas líneas también para agradecer públicamente a las autoridades y representaciones que nos acompañaron, con especial mención a la Armada Española, así como a los servicios de escolta; a nuestros hermanos sacerdotes por su servicio, y a nuestro nuevo Director Espiritual, don Ginés.
Vivamos con intensidad el día a día de nuestra Hermandad y reforcemos nuestro compromiso con sus fines esenciales. Por delante tenemos un año lleno de oportunidades y de proyectos ilusionantes que, juntos, a buen seguro vamos a conseguir. La Junta de Gobierno, a la que agradezco de corazón su implicación, está siempre dispuesta a acogeros con los brazos abiertos.
Os recuerdo que este próximo viernes, 25 de abril, a las 20:30 horas, celebraremos Santa Misa de Acción de Gracias en nuestra sede canónica de Omnium Sanctorum. Al finalizar, compartiremos un rato de convivencia fraterna en nuestra Casa de Hermandad, que es hogar de todos. Os invito a participar y seguir viviendo nuestra fe, en marrón y blanco.
Feliz Pascua de Resurrección.
José María Ferrero Dorado
Hermano Mayor